viernes, enero 4

Escritor


Me asusta pensar que he aprendido a olvidar
Que esta vez no tendré el placer de esa dulce tristeza en mis labios,
que en un pasado se adhirió a mi por el tiempo de vida de los dioses, rondado la mente hasta hacerme caer exhausta de tanto seguirte la mirada dentro de mis ojos.
Esta vez no fue así.

No quiero decir nada que no quiera escribir.
Quiero decirlo todo, pero aún no decido cuál es la pregunta que gestará a mis páginas en esta oportunidad.
Tal vez sea la ausencia de tristeza que no me permite crear una historia. No es de masoquistas el valorar a las penumbras que alumbran a la inspiración haciéndole volar hacia ti, escritor.
Estoy feliz y me cuesta creer que aún así puedo escribir, me cuesta hacerte creer que en verdad me siento así.

Es la totalidad de la libertad ascendiendo sobre mi habitación desprendiéndome de lo que una vez me causó temor y ahora parece un chiste más, de esos que mi abuela no logra aprenderse y contar.
Fuiste cadenas que presionaban mis huesos al suelo aumentando mil veces la gravedad, que engañaron a  mi corazón haciéndose pasar por abrazos y por poco, terminan suprimiéndolo.
Poseo la tranquilidad de conciencia de un agnóstico mas y mantengo el fuego encendido para quién necesite algún camino alumbrar.

No dejo de creer, pero no creo en nada que me pueda lastimar.

"Si un escritor se enamora de ti, nunca morirás".
Jorge Luis Borges